Argentina - El aborto sigue siendo ilegal, pero las mujeres no arremen en las calles del Paìs

Entrevista con Ana Laura Camarada

23 / 8 / 2018

Ana Laura Camarda es Prof. y Lic. en Letras (Universidad de Buenos Aires). Se desempeña como docente en escuelas medias. Participa de la agrupación de graduadxs Letras Vuelve (Facultad de Filosofía y Letras - UBA) y es docente en contextos de encierro, en cuyo marco también colabora con el Sindicato Unido de Trabajadorxs Privadxs de la Libertad Ambulatoria), formado en la Cárcel de Devoto.

1. El miércoles 8 de agosto el Senado argentino rechazó el proyecto de ley sobre la interrupción voluntaria del embarazo. Durante el voto y después, en las plazas se gritaba y se sigue gritando: "¡Por las calles ya es ley!" Esta es la demostración de que el tema de la autodeterminación de las mujeres tiene consenso social, así como muchos otros vinculados al movimiento "Ni una menos". A partir de esta fuerza radical, que hemos visto con las movilizaciones pasadas y durante el día de la votación, ¿qué escenarios se abren después del voto para el movimiento feminista? ¿Cuáles consecuencias conlleva para las mujeres la decisión de los senadores?

Creo que el voto negativo de los senadores fue una desilusión por varios motivos. El primero es que eventualmente el aborto va a legalizarse en la Argentina pero hasta que eso suceda miles de personas gestantes pondrán en riesgo sus vidas y su salud en abortos clandestinos. El otro gran motivo por el que es una desilusión es porque el Congreso es el órgano de gobierno que directamente representa al pueblo y ese voto claramente fue en contra de lo que el pueblo reclamaba en la calle de sus representantes. Sin embargo, lo que quedó a la vista es que por primera vez (es la séptima vez que se presenta en el Congreso la ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo), la causa fue abrazada por millones de personas y no sólo por mujeres militantes. Y se trazaron fuertes de redes de organización y solidaridad. Creo que el gran desafío es replicar estas redes y hacerlas crecer para que las mujeres, aún en la clandestinidad, tengan a quién recurrir y disminuyan la exposición de sus vidas.

2. El Senado ha demostrado que está ocupado por personas influenciadas por la derecha católica que se oponen no sólo al proyecto en cuestión, sino también a aceptar el cambio cultural y antropológico que, desde abajo, está llevando adelante el feminismo. ¿De dónde viene esa barricada institucional? ¿Crees que todavía refleja una parte consistente del sentido común de la población de Argentina? 

El hecho de que nuestro país todavía adopte el culto católico, apostólico, romano como culto oficial no es un elemento menor. A su vez, se agrega que la iglesia como institución tiene un peso fuerte en la sociedad. A su vez, por el lugar que también ocupan la iglesia a través de las escuelas que de ella dependen. Creo que esto ha instalado una especie de sentido común que no está tan arraigado en la sociedad como se intenta demostrar pero sí opera en lxs representantes. Un ejemplo bastante evidente es el caso de aquellxs que representan a las provincias del norte del país, donde la influencia eclesiástica es aún mayor. Estxs senadores planteaban que la voluntad del pueblo de sus provincias era el rechazo a la ley. Sin embargo, son las provincias donde el flagelo del aborto clandestino es aún mayor porque el acceso a los recursos y la información es más limitado. Y si bien es posible que no hubiera una manifestación tan clara a favor de la legalización del aborto, está claro que es una región duramente atravesada por esta problemática. 

Creo importante destacar en este punto, el rol institucional de las iglesias (católicas pero también evangélicas) y separarlo del de aquellas personas y organizaciones que desde la fe han intentando promover la aprobación de la ley (uno de los casos paradigmáticos en este sentido, es el de Católicas por el derecho a decidir, que forman parte de la Campaña desde hace años).

3. Nos gustaría saber algo sobre la organización y movilización feminista de estos últimos meses/años. ¿Habéis creado plataformas, comunidades informales y autogestionadas de ayuda mutua? ¿Qué programa propone el movimiento sobre igualdad de derechos en el trabajo para las mujeres, feminicidios y violencia de género, cultura de educación sexual? 

Creo que lo que caracteriza al movimiento de mujeres es su diversidad y pluralidad. En ese sentido, no considero que se pueda hablar exactamente de un 'programa', porque al ser un movimiento, su composición es muy heterogénea y en tanto tal, manifiesta convergencias y divergencias. Sin embargo, sí creo que algunas acciones sí se han vuelto más programáticas para el colectivo en su conjunto. Hacer crecer los espacios de socorristas (son espacios de mujeres que orientan sobre la práctica segura del aborto con misoprostol). La convocatoria espontánea para reclamar ante un nuevo femicidio y el crecimiento que muestran ciertas fechas fijas año a año (la marcha Ni Una Menos el 3 de junio y el paro de mujeres el 8 de marzo, como ejemplos). La utilización del pañuelo verde no sólo como marca de que reclamamos la legalización del aborto, sino también de que queremos visibilizar nuestros reclamos. La exigencia más firme de que se cumplan la Ley de Educación Sexual Integral, los programas de salud sexual y reproductiva y el protcolo de asistencia para la interrupción legal del embarazo.

4. Uno de los aspectos que parece caracterizar al movimiento feminista es su capacidad de producir alianzas y coaliciones con otros movimientos en Argentina (luchas por los desaparecidos, los mapuches, y las reivindicaciones salariales). Un verdadero poder interseccional atraviesa estos movimientos, haciéndolos capaces de abordar un complejo de temas y asuntos desde diferentes perspectivas y siempre en conexión abierta con otros colectivo y experiencias. ¿Podrías decirnos algo al respecto? 

Creo que podríamos destacar dos cuestiones centralmente. La primera es que muchos de los reclamos feministas son reclamos de ampliación de derechos. Resulta curioso que algo tan necesario exija tanta lucha y enfrente tantas resistencias. Pero considero que a grandes rasgos esa descripción caracteriza a muchos de esos movimientos, lo cual produce mancomunión. Por otro lado, considero que tiene que ver con el lugar de oprimidas (es una definición muy genérica pero representativa) que las mujeres enfrentan, que también caracteriza a esos colectivos y que -en tanto tales- produce solidaridad.